miércoles, 29 de abril de 2015



VIOLINISTAS COOL'S


Julia Fischer 





(Múnich15 de junio de 1983) es una violinista y pianista alemanaDestaca por su gran fuerza técnica e interpretativa, ha recibido gran estima del público y crítica. Su repertorio es amplio y variado, no obstante prefiere en particular las obras clásicas y del siglo XIX. De notable relieve han asumido recientemente sus interpretaciones de los 24 Caprichos de Paganini, y como resultado de una provechosa colaboración con la Academy of Saint Martin in the Fields en los conciertos de Johann Sebastian Bach. Artista invitada en la Orquesta Filarmónica de Berlín, ejecuta las obras de Beethoven con la Orquesta Filarmónica de Londres pero también a ChaikovskiBergJachaturián en RusiaEspañaEstados Unidos y Hungría.








VIOLINISTAS COOL'S


Lindsey Stirling


(Santa Ana, California, 21 de septiembre de 1986) es una violinista, bailarina, artista de performance y compositora estadounidense.

 

Es conocida como la violinista del hip hop, ya que no se limita a tocar música clásica sino que es famosa por sus dubsteps y por las pistas y los performances de sus canciones. Su último álbum, Shatter me, ha tenido millones de ventas y visitas en youtube.




 Violinistas más reconocidos 

Arcangelo Corelli: es uno de los personajes más importantes en la historia de la música. Fue discípulo de Bassani (creador del arco de “cremallera”) y fundó en Roma la primera escuela de violín, de la que salieron alumnos como Geminiani, Locattelli, Somis,… Corelli vivió en una época de plena expansión del violín y en un país donde el arte de la luthería había alcanzado la perfección. En Italia, el violín reinaba con poderío, a la altura de la voz humana con la que rivalizaba a menudo.


Investiga sobre problemas técnicos y fisiológicos del instrumento, fijando además la forma de la “sonata” antigua (lento-vivo-lento-vivo) y del “concerto grosso”. Gracias a Corelli, diversos constructores crearon un arco más perfeccionado, apto para ser utilizado en la nueva literatura violinística que se estaba escribiendo. Además, aconsejó a otros compositores sobre la conveniencia de que el registro del violín no sobrepasara los límites de la voz de una soprano ligera.  
 

Antonio Vivaldi: La influencia de Vivaldi en su generación y en la que le siguió inmediatamente es innegable. Realizó una intensa actividad como director, violinista y compuso 207 conciertos para violín, 26 de ellos para dos violines, 5 para más de dos violines y 3 para violín, dos orquestas y continuo. Además fijó la definitiva forma tripartita del concierto para solista, destacando e independizando la línea del solista de la orquesta.


Leopold Mozart: vivió entre 1719 y 1787 y publicó un trabajo en 1756 que llevó el título de “Tratado de los principios fundamentales de la técnica del violín”. Aunque Leopold Mozart era austriaco, este método es representativo de la antigua escuela alemana de violín. En este trabajo nos ilustra sobre la forma de interpretar del siglo XVIII, golpes de arco, ornamentación,… siendo especialmente interesantes las explicaciones sobre el modo de sujetar el violín. La clavícula no es ya apoyo suficiente, especialmente durante los cambios de posición, por lo cual, es necesario utilizar el mentón sobre la tapa del violín en el lado derecho del cordal, su colocación primitiva.


Niccolo Paganini: sigue siendo el mayor virtuoso que ha conocido la historia del violín, considerado como la encarnación del artista romántico, con una imagen misteriosa, casi demoníaca, y una técnica deslumbrante. Célebre en toda Europa, fascinó a sus contemporáneos gracias a una técnica tal que la leyenda le atribuyó un poder sobrenatural. En los conciertos interpretaba sus propias obras, plagadas de extremada dificultad, realizando un autentico espectáculo circense en cada aparición, sonidos “diabólicos” que dejaban hechizado al público asistente.

Autodidacta, este gran virtuoso estuvo muy influenciado por la ópera que estaba en pleno auge. Contemporáneos suyos fueron Rossini, Bellini, Donizetti,… en cuyas obras imperaban las agilidades y virtuosismos para la voz así como largas frases y melodías de lirísmo muy del gusto popular. Pagannini dio ese mismo trato al violín, está por encima de todo, es el “divo”.
 


David Oistrakh: Violinista ruso unánimemente aclamado por su virtuosismo, por su excelente técnica y su potente sonoridad.Su primer concierto con orquesta fue el que tuvo lugar en 1923, con el concierto en La menor de J. S. Bach. En 1925 tocó con la orquesta de la Academia de Odessa. Trabajó desde 1934 como profesor en el Conservatorio de Moscú, y tuvo como discípulo, entre otros, a su hijo, el violinista Igor Oistrakh.

Reconocida su genialidad con el Premio Elizabeth de interpretación en 1937, durante la década de los 50 triunfó en sus giras por todo el mundo, acompañado a veces por su hijo, con un amplísimo repertorio clásico y contemporáneo. Algunos grandes compositores, como Prokófiev, llegaron incluso a componer para él.

Accesorios del violín
*Barbada o mentonera:


Es uno de los imprescindibles aunque realmente no se empezaron a usar hasta hace unos 160 años. Por esa razón algunos violines antiguos tienen el barniz desgastado en la zona en la que se apoyaba la barbilla.
La barbada ha de ser apropiada a la forma y tamaño de la barbilla. Encontrar una que se adapte bien sólo se consigue con experiencia (o con suerte).
La barbada se puede colocar encima del cordal, a un lado, o en algún sitio entremedias. Cuanto más cerca del cordal, más alineado quedará el instrumento con tu cuerpo, y viceversa.
Hay barbadas de diferentes materiales, desde los de plástico hasta los de maderas de calidad como ébano, palo de rosa, boj, etc. Conviene que la barbada sea acorde a la calidad del violín, aunque, como todo, cuanto mejor sea mayor comodidad y menores problemas. El plástico puede hacer sudar, a algunos la madera les irrita. También hay barbadas que se venden con un recubrimiento de cuero, en principio para evitar alergias






*Almohadilla:


La almohadilla es una innovación reciente teniendo en cuenta la edad del violín, y de hecho muchos violinistas aún no la usan. Creo que todo violinista debería probar a tocar sin ella una temporada, aunque si tienes el cuello largo probablemente la necesitarás.
La almohadilla eleva el violín, de modo que evita tener que inclinar la cabeza hacia la izquierda, aunque a cambio se debe levantar más el brazo derecho. La altura de la almohadilla habría que equilibrarla con la altura de la barbada para encontrar la combinación perfecta.
Las almohadillas más habituales están fabricadas en metal y cubiertas con goma blanda, sujetas al violín mediante abrazaderas, y suelen ser ajustables a la anchura del instrumento, y a veces también en altura, lo que es muy conveniente. Pero hay muchos otros tipos de almohadilla: de material sintético, de madera cubierta con cuero, hinchables, una especie de cojín sujeto con tiras de cuero, etc. Algunos niños al empezar emplean una simple esponja sujeta con gomas. En cualquier caso, siempre es conveniente que la almohadilla tenga el menor contacto posible con el fondo del violín, para que no apague su sonido.



* Sordina:


Uno de los accesorios más frecuentes y necesarios. Salvo que se empiece de muy pequeño, a menudo sucede que nos avergüenza que se oigan nuestros primeros ensayos con el violín. Suele hacer más ruido del que esperamos y ese miedo a que nos estén escuchando puede provocar que toquemos con el brazo encogido, sin presionar bien las cuerdas, etc. También son útiles cuando tocamos con instrumentos con menor proyección de sonido como guitarras acústicas por ejemplo.
La sordina apaga el sonido, pero también lo hace más mate, suave y cálido. Funciona absorbiendo parte de las vibraciones, así que cuanto más grande y pesada sea, más se atenuará.
Hay sordinas de plástico, metal, madera o goma. Las más habituales son las que tienen forma de peine pequeño y pinzan el puente. Otros modelos son deslizantes, y se pueden quitar y poner rápidamente en medio de una obra deslizándolas hacia el cordal.

 


Partes del violín



*La voluta:

La voluta no tiene ningún propósito práctico más que equilibrar el peso del instrumento. Sin ella, el violín sería pesado en la parte de abajo. La adición de una voluta en el extremo del cuello proporciona una cierta estabilidad adicional. El diseño de la voluta depende totalmente del fabricante de violines, pero hay poca variación en el diseño de violín a violín.





*El cuello:

El cuello está entre la voluta y el diapasón del instrumento. La mano izquierda se coloca en el cuello del violín con los dedos curvados alrededor de las cuerdas. El cuello ayuda a sostener el instrumento y permite que el violinista active cuerdas individuales con sus dedos.

*Clavijas:


Los cuatro clavijas corresponden a las cuatro cuerdas. Cada clavija permite al violinista sintonizar una cuerda individual. Las cuerdas individuales de un violín se enrollan alrededor de la clavija para crear tensión en el tono deseado. El tono aumenta a medida que las cuerdas se enrollan con más fuerza.

*Diapasón:

El diapasón es el lugar donde el violinista pone sus dedos. Cada dedo tocará una cuerda separada permitiendo un movimiento rápido hacia arriba y abajo del diapasón, según sea necesario. El diapasón se curva ligeramente para que cada cuerda se puede tocar individualmente.


*Las "efes":

En el violín hay dos hendiduras con la forma de las efes cursivas que se usan en notación musical para indicar forte. También se llaman oídos o eses, porque cuando se diseñaron, antes del siglo XVIII, la ese larga tenía esa misma forma. se trata de dos aberturas de resonancia cuya función es aumentar la dinámica sonora y variedad de frecuencias del instrumento.